En muchas ocasiones escuchareis a vuestros hijos e hijas hablar de los rincones, ¿pero realmente sabemos cómo y para que sirve el trabajo por rincones?.
El trabajo por rincones es una forma de organización metodológica que propicia el aprendizaje autónomo y cooperativo. La clase se divide en rincones de trabajo cada maestro acuerda y decide qué rincones va a establecer y si van a ser para todo el año o van a ir cambiando, dependiendo de la secuencia didáctica o del proyecto que estemos trabajando (Para la secuencia de las plantas y los insectos creamos el rincón de las flores y cuando se ha acabado, lo hemos desmontado, para el proyecto del cuerpo humano pusimos el rincón del hospital....) y luego hay rincones que son fijos para todo el año, como el de construcciones, el arte o la biblioteca.
Una de las grandes ventajas de esta forma de organizar el aula, es que cada grupo sabe lo que tiene que hacer y este trabajo es autónomo, lo que a mi me permite sentarme con los que más lo necesitan o ponerme el el rincón que considere que es el que más supervisión mía necesita, lo que asegura un aprendizaje más individualizado y de mayor calidad.
Para que veáis un ejemplo de los rincones os voy a poner algunas fotos de los trabajos de rincones que estamos llevando a cabo.
En el rincón de experiencias, los chicos y chicas están experimentando con la luz, diferenciando elementos que dejan pasar la luz y elementos que no, y estableciendo hipótesis sobre el porqué de este fenómeno.
En le rincón del juego simbólico estamos haciendo teatro de guiñoles.
Y mientras en el rincón de las letras hemos colocado en el cristal una pizarra mágica y con rotuladores vileda, escribimos.
De esta forma todos estamos en continua actividad aprendiendo y a la vez respondiendo a la necesidad de actividad y movimiento de los niños y niñas.
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